Detectores de droga en la bebida
Cada día aumenta los casos de violaciones que vemos en las noticias. Parte de ellos, se producen tras drogar a la víctima en cuestión, introduciendo algún tipo de substancia en su bebida.
Hoy, desde el área de la mujer e igualdad del SCF, nos preguntamos por qué no aumenta el eco en la prensa de las diversas herramientas que se han inventado para detectar droga en la bebida y por qué está tardando tanto en comercializarse dichos productos.
Durante el año 2017 se han creado tres utensilios sencillos pero muy útiles, los cuales evitarían que nos drogasen a través de la bebida. Ellos son: una pajita que se pone de color azul al entrar en contacto con sustancias estupefacientes, un líquido reactivo que puede guardarse en el bolsillo ya que es un bote pequeñito y una servilleta que también cambia de color al verter una gota de nuestra bebida adulterada. Ninguno de ellos puede impedir una violación, pero pueden ayudar a disminuir la cantidad de casos y situaciones peligrosas.
La cañita con tiras reactivas que se pone de color azul cuando entra en contacto con agentes químicos como los que contienen el éxtasis líquido, ketamina o el Rohypnol; ha sido creada por tres alumnas de Florida. Con este simple objeto podríamos comprobar discretamente si el líquido ha sido manipulado cuando alguien nos ofrece una copa o simplemente, tras dejar un rato sin vigilancia nuestro vaso.
Por otro lado, cuatro estudiantes de Bilbao son los responsables de Safe Night, un detector de droga en la bebida que se basa en echar unas pocas gotas de la consumición en un vial que contenga el reactivo que diseñaron. Si hubiese cualquier rastro de droga, el líquido del frasquito pasaría de un marrón transparente a un blanco opaco. Dicho vial puede guardarse en cualquier sitio ya que viene presentado en un bote pequeño y detecta la escopolamina y la cocaína, aunque están estudiando añadir reactivos de más sustancias.
Finalmente, también en Estados Unidos han desarrollado KnoNap, una servilleta capaz de detectar 26 tipos de drogas de manera sencilla. Lo único que se debe hacer es verter una gota de la bebida en el área blanca de la servilleta y si esta tiene alguno de los 26 tipos de drogas, en cuestión de dos minutos la servilleta se volverá amarilla en una de las esquinas del cuadro.
Lamentablemente, todavía no ha empezado la comercialización de ninguno de estos productos y esos que sus autores apuntan a que podrían ser muy económicos. En el caso de Safe Night, creen que el vial podría costar un euro, mientras que en el de KnoNap quieren que cueste lo mismo que una servilleta normal para poder encontrarla en todos los bares.
Desde el SCF queremos difundir al máximo estas herramientas tan útiles y esperamos que lleguen pronto a su comercialización.